miércoles, 15 de julio de 2009

Pepe el Hipopotamo

Bueno amigos este articulo lo encontré en un blog, el merito es de su autor y dejo el link a su pagina, pero, es de anotar que en un país como el nuestro donde se acciona un arma tan fácil y rápido a nombre de la seguridad democrática, también se ve reflejada esta clase de política en la vida silvestre. mas concretamente con la muerte de Pepe el hipopótamo, como bien el autor de este articulo propone muy acertadamente esto se llama “Seguridad eco-democrática”,



11 Julio 2009 de Tomáz


“El hombre es en verdad el rey de todos los animales, pues su crueldad sobrepasa a la de estos. Vivimos de la muerte de otros. ¡Somos tumbas andantes!. Llegará el día en que los hombres serán juzgados por la muerte de un animal como hoy se juzga el asesinato de un hombre.“
-Leonardo Da Vinci

Uno de los colombianos más recordados, sin duda, es el narcotraficante Pablo Escobar. Los uribistas lo quieren porque si no fuera por él su presidente no estuviera en el poder, otros lo aprecian porque construyó barrios en Medellín y otros más por la cantidad de policías que fueron asesinados a su cuenta. Pero una de las historias más memorables de Pablo es que cuando estaba con vida trajo todo tipo de animales a su hacienda desde diversos lugares del mundo, con el fin de construir un zoológico personal. Entre estos animales había un par de hipopótamos, traídos desde África, que con el tiempo se reprodujeron hasta convertirse en 23 ejemplares. Hoy la hacienda Nápoles es una especie de museo, donde se conservan algunas pertenencias del difunto narcotraficante y son expuestas al público. Entre éstas están los ya mencionados hipopótamos. Pues bien, según dice Corantioquia -la entidad responsable de la administración de los recursos medioambientales del departamento de Antioquia-, ya no hay dinero para cuidar a estos hipopótamos, y no hay zoológico alguno que se atreva a recibirlos. Cambiarlos de hábitat sería peligroso para ellos. Según dice Luis Alfonso Escobar, director de Corantioquia, los animales están difundiendo enfermedades en el lugar en que se encuentran y “nadie los quiere”. De los 23 animales que había en la hacienda Nápoles, escaparon cinco, por lo que se dio orden expresa de buscarlos, y nuestro valeroso ejército ya logró dar con el primero, o, dicho de otra forma, ya logró darle al primero: El gobierno ha proyectado el caso como una oportunidad para hacer ejercicio de un nuevo macroprograma que se llama “Seguridad ecodemocrática”, en la que la solución no es muy distinta a lo que ya estamos acostumbrados: “El o los cadáveres serán eviscerados y preparados para el transporte en el sitio del sacrificio. Las visceras serán enterradas y las carcasas serán transportadas por tierra en camión a la colección privada de Federico Pfeil Schneider en Bogotá D.C., o a la colección de Parque Zoológico Jaime Duque en Tocancipá, (Cundinamarca).” Mientras estos animales deben estar en un centro de recuperación de fauna, o en un zoológico; es preferible dejar que se enfermen y difundan enfermedades entre las personas. Es en este tipo de reparación que se deben emplear los millones que se incautan al narcotráfico, o por lo menos los que se incautaron a Pablo Escobar (que no fueron pocos), pues la mayor excusa que tiene el gobierno para autorizar la muerte de los animales es que no hay dinero suficiente para mantenerlos con vida. “Por esos días Colombia había recibido dos solicitudes internacionales para adoptarlos. La primera provenía de una reserva forestal costarricense llamada África mía, y otra de un colombiano residente en Nueva York. Por costos fueron negadas.” Y así va la situación con los hipopótamos. No es nada nuevo que en este país el dinero del narcotráfico favorece a todo aquél que en verdad no lo necesita, pues para todo lo demás están las balas.

Link del autor de este articulo:

http://donblogperez.wordpress.com/2009/07/11/los-hipopotamos-de-pablo-escobar/


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